MATTIA

Mattia es una personalidad explosiva, de los que va con la verdad por delante, como se suele decir con “los huevos cuadrados” y una cabeza bastante dura por lo visto.

En su época fue skater profesional pero por muy bueno que seas, el asfalto es duro, las caídas duelen y, ostia tras ostia, al final acabas planteándote qué hacer con tu futuro. En su caso, Mattia pensó en la idea hacer bicicletas hechas a mano, grandes bicicletas.

Instinto, pasión y talento, mucho talento; su taller es la máxima expresión de su gran trabajo, una dimensión hecha de tubos de acero, herramientas, música, cervezas artesanales, y sus dos makitas: uno, el “instrumento” que usan los artesanos para dar formar a sus creaciones, y el otro, su inquieto gato que lo sigue atento por todos los rincones del taller.

En ningún momento de la «entrevista» deja de trabajar (si no es para tomar una cerveza con nosotros) y es un espectáculo ver cómo se desenvuelve entre soldadores y utensilios, haciendo fácil aquello que para muchos sería casi imposible de reproducir.

ACTITUD

Del skate lo que más marcado me ha quedado, es la actitud. Por mucho que cueste, por muchas ostias que te des, por cuantos intentos no te salgan bien, si quieres lo puedes conseguir, todo está a nuestro alcance si realmente queremos conseguirlo.

COMIENZOS

He empezado a interesarme por las bicicletas de pista alrededor del 2008, no había todo el movimiento que hay ahora, en esa época se organizaban los primeros alleycats en Italia.

Probablemente en las bicicletas vi el futuro que no encontré en el skate. Desde pequeño siempre me ha gustado trastear en el taller de mi padre, decidí comprar un taller a las afueras de mi ciudad (Brescia). Se lo compré a un artesano a cambio de que me enseñara algo como  construir una bicicleta, pero al final nunca vino. Por el contrario, en el taller encontré muchas joyas, me refiero a bicicletas preciosas, modelos extraños y muy poco vistos, componentes todos rigurosamente made in italy, y todos abandonados.

APRENDIZAJE

Brescia, ciudad del norte de Italia, patria de la artesanía. Mattia nos cuenta sus primeros pasos como framebuilder y sus “maestros” como Lissignori, Serena y Zullo

Fue así como fui a picar a la puerta de Gino Lissignori, el que considero como mi primer maestro. Gino me ha enseñado las bases, métodos y, en parte, como se hace este increíble trabajo. La historia en realidad es bastante curiosa porque, cuando fui a preguntarle la primera vez, él se negó porque tenía el torno roto; y a mí no se me ocurrió otra cosa que decirle: –¡si te arreglo el torno me enseñas como se hace una bici!-. No tenía ni idea de cómo arreglar aquella máquina pero, con un poco de habilidad y de suerte, conseguí arreglarlo. Se ve que era el destino.

Junto con Gino realicé dos frames. Me enseñó mucho sobre las técnicas y algunos trucos, y en breve tiempo nos hicimos muy amigos. Al principio hacia mucho custom y se aprende mucho, cada bicicleta es diferente de la otra.

Otra persona en la que me he inspirado mucho es uno de los más grandes artesanos constructores en Italia, Piero Serena. No he tenido la suerte de conocerlo y, menos trabajar con él (falleció en 2005). La mujer de Piero me dejó todas sus herramientas, un gesto que para mí no tiene precio, y puedo decir que, gracias a sus trabajos, su forma de construir bicicletas y sus herramientas, he aprendido mucho sobre cómo trabajar.

El paso siguiente fue ir a trabajar con Zullo, donde he aprendido a nivel técnico, y sobretodo he tenido finalmente la posibilidad de aprender mas lo que es la parte manual de este trabajo. Trabajando con «modelos» he podido practicar muchísimo y aprender un buen método de trabajo.

2010, NAHBS y BICIS REGALADAS

El 2010 fue un año muy importante por mí. Diría que fue el año en el cual me di cuenta que esto de construir bicicletas podía convertirse en un trabajo de verdad. En el BFF (Bike Film Festival) conocí a David Trimble y JT, que me encargaron dos bicicletas de pista. Después, hice un viaje a américa con David al NAHBS (North American Hand Made Bike Show), una experiencia increíble que fue como un sueño hecho realidad ya que tuve la posibilidad de exponer mis bicicletas en la feria de bicicletas hechas a mano más importante del mundo.

Bicicletas regaladas… ja,ja,ja. En esa época (2010), ¡la mayoría de gente corría los critériums en tejanos!

Me acuerdo que en la línea de salida del Red Hook de Milano, en 2010, le grité a mi amigo Ortu (Jon Ander Ortuondo): –¡Si le ganas a los americanos, te hago una bicicleta!– refiriéndome a la mayoría de los favoritos, en su gran parte estadounidenses. No sé si fue por lo que le dije, pero ese año, Ortu ganó el RHC, y yo le fabriqué una bicicleta de MTB.

Con Cris Thormann me ocurrió más o menos lo mismo. Aposté con él que si ganaba el Monstertrack, le hacia una bici. ¿Resultado? Cris también ganó y le hice una Legor Singlespeed de CX. Bici que utilizó para ganar el alleycat que se celebró en el campeonato mundial de mensajeros en México este año.

¡Tengo la mala suerte de tener amigos que se les da bien ganar carreras imposibles!

BARCELONA

¿Por qué Barcelona? Porque cuando hacia skate solía venir por aquí ya que es un emblema mundial para patinar y me encanta. En Barcelona hay sol, playa, montaña, el alquiler de un local relativamente cerca del centro es bastante barato respecto a lo que me costaría en Italia y, en general en mi país, la pequeña empresa esta maltratada.

Otra cosa importante para mí, es que casi todos mis mejores amigos también viven aquí. Así que decidí cargar todo en un tráiler, y cogí a mi mujer, nuestras cosas, toda la maquinaria, y venir a vivir a la ciudad condal.

A lo mejor he perdido el Made in Italy pero el Man di Italy, sigo siendo yo.

PRODUCCIÓN

En general soy yo que sigo todo el proceso desde el principio hasta el final, y en muchas ocasiones la parte más complicada es entender las necesidades del cliente, o mejor dicho, que el cliente se aclare sobre lo que realmente quiere. Parece una tontería, pero hay días que paso más horas con el ordenador que en el taller. Dicho esto, una vez que consigo interpretar el cliente, hago lo mejor que puedo para conseguir la bicicleta perfecta para las necesidades de la persona, sin pensar solo en el dinero. Lo más importante es que la gente se sienta contenta y satisfecha con las bicicletas que produzco.

En cuanto a componentes trabajo con grandes marcas como Chris king, Enve, etc. no es tanto una cuestión de prestigio, sino más bien por la importancia de tener buenas sensaciones al rodar con la bicicleta, que se deje llevar y conducir, y estas marcas producen, la excelencia en cuanto a calidad.

En tema de pintura, desde que estoy en Barcelona, trabajo con Killian, que conocí gracias a Simon y Lerri de My Beautiful Parking. Estoy muy contento con su trabajo, decidimos juntos las ideas y las mejores soluciones cromáticas para cada bicicleta.

CUÉNTANOS TU BICICLETA FAVORITA…

A ver, mi bici favorita por ahora es el modelo nuevo de MTB Indole 29er estoy muy contento del resultado final que he conseguido, es una bicicleta muy ligera, que responde muy bien y trabaja perfectamente en todas las situaciones. Llevo dos meses utilizándola muy intensamente y la verdad que esta bici me entusiasma mucho. He hecho el modelo de referencia del MTB. Ahora para Legor tengo pensado un proyecto nuevo, una bici de pista basado en el modelo Porreca pero con horquilla en acero de 1 1/4». ¡A ver qué tal saldrá!