Click here to switch to English

Bike Review: Argonaut Cycles

Siguiendo con los test de bicicletas y, de nuevo gracias a los amigos de The Service Course, tuvimos la oportunidad de probar la que es un objeto de deseo para muchos, una obra de artesanía en carbono, hablamos de Argonaut Cycles.

Para ponernos en antecedentes, la compañía nace en Oregón (USA), un estado donde abundan los fabricantes artesanales de bicicletas, una de las cunas del handmade in USA en cuanto a bicicletas se refiere. Ben Farver era uno de ellos, empezó construyendo cuadros de acero, pero, años después, decidió diferenciarse construyendo cuadros a la carta en carbono, personalizar cada tubo y unión para que todas y cada una de sus bicicletas fuera única y sacar el máximo rendimiento posible, así nace Argonaut Cycles.

La esencia custom build se aprecia en cuanto tienes una Argonaut delante. En su configuración de pintura estándar, los chicos de Bend dejan el carbono desnudo en su mayor parte, y pueden apreciarse todas las ondulaciones, refuerzos, láminas y lijados en cada una de las uniones. Si dispones de algo de luz natural y acercas la vista a sus tubos, entiendes que estás ante una pieza artesana y perfectamente acabada.

Hay puntos clave del cuadro donde la marca hace foco para personalizar la experiencia de uso en sus cuadros. El tubo de dirección es quizá la primera parte del cuadro que ves diferente, el carbono deja de ser unidireccional y se aprecian los refuerzos, los cuales influirán en el comportamiento y agilidad de la rueda delantera, adaptados al estilo de su propietario.

Otro punto clave es el tubo inferior/diagonal, que es una de las partes que más personalización permite en términos de absorción del cuadro.

Argonaut es capaz con este método, de adaptar el comportamiento de la bicicleta a lo que busque el futuro propietario, según se apliquen dichos refuerzos y dichas geometrías, conseguiremos una bicicleta cómoda para largos viajes o agresiva para competir, 100% custom.

“La Argonaut te pide devorar kilómetros sin renunciar a la velocidad.”

Otro elemento que llama la atención es el eje pedalier, de generosas dimensiones y adaptado para el estándar de Chris King T47. Los de Portland colaboraron estrechamente con Argonaut para el desarrollo de este sistema, este hecho habla por sí solo, si la afamada marca de bujes y direcciones confió en ellos, no es casualidad.

La Argonaut que pudimos probar iba montada con un grupo Shimano Dura-Ace 9150 Di2 equipado con frenos de disco. Los puntos de contacto, manillar y sillín, eran de la marca PRO, concretamente los modelos Vive y Stealth Carbon respectivamente. La potencia y tija Enve conjuntaban con las ruedas SES 4.5 disc de la misma marca, las cuales montaban una pareja de neumaticos tubeless Hutchinson Fusion de 28mm

¿Y todo esto en que se traduce dinámicamente en la unidad que pudimos probar? Pues podríamos resumirlo como una bicicleta rígida y cómoda al mismo tiempo, con gran rigidez lateral y comodidad especialmente en la parte delantera, lo que nos permitía ir realmente rápido en ella, con gran sensación de aplomo. En ciertos aspectos nos recordó a las sensaciones que transmiten los cuadros de acero de más alta gama, pero con una gran ligereza.

Fotos de: Brazo de Hierro

Deja un comentario